Los animales y las plantas están compuestos por células similares

Los animales y las plantas poseen necesidades externas similares que deben ser proporcionadas para sustentar la vida. Algunas cosas obvias que tanto animales como plantas necesitan regularmente para la supervivencia básica son aire, agua, y nutrientes. Tanto animales como plantas tienen habilidades de adaptación que les permiten sobrevivir en condiciones menos que óptimas. Sin embargo, la mayoría de los animales y plantas tienen características únicas que les permiten prosperar en ciertas condiciones o en un ambiente específico. Por eso, tanto los animales como las plantas poseen necesidades individuales en cuanto a límites de temperatura, nivel de humedad, y cantidad de luz solar para crecer bien y reproducirce.

Los animales y las plantas tienen descendientes genéticamente similares a ellos mismos para continuar la supervivencia de sus especies individuales. Durante la reproducción de cualquier planta o animal pueden ocurrir mutaciones genéticas. Estas mutaciones pueden causar cambios mínimos en el ADN. Las mutaciones pueden mejorar la supervivencia de las especies y ser transmitidas a la descendencia futura. Sin embargo, una mutación tal como un cromosoma defectuoso o ausente puede causar una descendencia defectuosa que podría resultar en una muerte prematura.

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